SecuenciaSonar


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C O M U N I C A D O


A mi querido público de lectores y amigos todos, con este pequeño aviso, quisiera por favor que me disculpen pero por motivos estrictamente de tiempo y trabajo que lo necesitaría para terminar y concentrarme sólo en mi segunda novela, en mi blog Flujanz ya no publicaría más artículos ni trabajos literarios hasta durante un tiempo o mejor dicho nuevo aviso. Salvo las producciones musicales y vídeo-clips de SecuenciaSonar, que sí las seguiría divulgando y actualizando cada cierto tiempo en este mismo espacio, así como también en el siguiente link, www.reverbnation.com/secuenciasonar. Por otro lado, no se preocupen que, para todos mis amigos en Facebook y Twitter, seguiré también escribiéndoles como siempre.

En ese sentido, a todos mis fieles seguidores, amigos, lectores y conocidos todos, les pediría que durante este tiempo de ausencia tuvieran también algo de paciencia, que pronto, muy pronto estaría, como siempre, yo y mi excéntrico personaje Flujanz de nuevo con ustedes para seguir deleitando (a unos) o quizá aturdiendo (a otros) con más escritos y ocurrencias mías. Y, bueno, lo fundamental, de paso también ofrecerles, después de mi primera novela ¿Por qué a mí? que ya ha sido publicada también en dos ediciones (2003 y 2008, respectivamente), mi otro gran segundo intento de ficción literaria o, si quieren, llamémoslo una otra historia de esas entripadas mías.


FREDERIC LUJÁN ZEISLER


Alemania, miércoles, 20 de marzo de 2013

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www.reverbnation.com/secuenciasonar




Wednesday, January 07, 2009

Las heces del ser humano





Antes de pasar a regalarles el interesante artículo que escribió en estos días Jaime Bayly, sobre las toneladas de heces que produce el ser humano (si gustan, podrían leer también la desgracia de Prudencio ) solamente me gustaría recalcar que este producto natural, conocido también en el lenguaje soez como caca para unos o mierda para otros, goza, a pesar de todo y según los sicoanalistas, de un buen cimiento como para presagiar algunos beneficios inesperados. Imagínese, algunos comentan que cuando uno sueña con caca, este perdón, digo sustancia excretada, podría asociarse también con dinero, mucho dinero. ¡Caramba!... Eso quiere decir entonces que yo, que cago como dos veces al día (en mi cumpleaños y navidad hasta tres), debería de ser ya hasta millonario, ¿o no? Por otro lado, si estos sueños van acompañados con asociaciones de perversión, sadismo, o miedo a introducirse en cuevas, cavernas, túneles pedregosos y alcantarillas (tal como nos lo describe el guacha floja de Bayly en su artículo), podría tratarse también de un notorio desarreglo de la personalidad; aunque, claro, creo que para este caso más podría referirse a una metáfora hiperbólica sobre la mierda y basura que es y será siempre el HOMBRE.

Publica Flujanz
Por © Frederic Luján

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Aquí va el artículo:

Un final hediondo
Por Jaime Bayly


No me gusta lamer genitales ni que laman los míos. No me gusta si se trata de mujeres o de varones. Me disgusta especialmente lamer genitales de mujeres y en muy raras ocasiones me puede gustar (aunque esto ya no me pasa hace años) que una mujer bese los míos.No me gusta penetrar orificios de mujeres y varones. No me gusta introducirme en cuevas, cavernas, túneles pedregosos, alcantarillas. No me gusta hundir mi fatigado colgajo en la baja policía de los individuos de este mundo. No encuentro placer alguno. Me da miedo, angustia y eso que ahora llamen estrés. Soy un enemigo de toda forma de penetración y, por extensión, de toda forma de pene que intente penetrarme.En efecto, no sólo me disgusta introducir mi desdichada verga comatosa en cualquier orificio humano, seco o lubricado, sino que me disgusta todavía más que alguien, por lo general un varón, intente horadar el reducido y estragado agujero que controlan mis esfínteres para evacuar el vientre, una operación que, con cuarenta y cuatro años ya casi cumplidos, me resulta cada vez más ardua, seguramente por la masiva cantidad de psicotrópicos que están destruyendo mi hígado y mi vida en general, aunque paradójicamente dicha destrucción no parece exenta de placer, reflexión y conocimiento cabal de mis propias miserias.Lo único cierto a estas alturas es que soy un hombre solo, que no me interesa el sexo en ninguna de sus formas y que estoy condenado a vivir a solas el resto de lo que me quede por vivir, que presiento que no será mucho.Y no porque me parezca glamoroso o sexy morir joven sino porque ya no encuentro sentido alguno a la vida y siento que hice todo lo poco que tenía que hacer. Lo que confirma, sin la menor duda, que soy un mediocre, un pusilánime, pero un mediocre feliz, con la sensación del deber cumplido.Lo que me obsesiona últimamente es que lo único seguro en los miles de millones de humanos que poblamos el planeta, en los miles de millones que nos han antecedido y perecido en el caos puro que es la frágil existencia humana, es que el ser humano puede ser bruto o inteligente, emprendedor o haragán, simpático u odioso, puede producir una idea ingeniosa o innovadora o ser un perfecto inútil, puede dejar una contribución valiosa a la humanidad o, lo que es bastante más común, ser una insignificancia ridícula y prescindible en el contexto de la historia de la especie humana, un accidente genético que no sirvió de nada ni mejoró en modo alguno la evolución de los mamíferos parlantes que somos; pero, dentro de esa variedad de monos devenidos hombres que somos, una cosa es segura, irrefutablemente segura: lo que siempre produce el ser humano, no importa su cultura, su religión, su lengua, su sexualidad, es mierda, un montón de mierda, toneladas de mierda. El ser humano es, en efecto, y sin excepción conocida, una máquina de producir mierda. No es muy seguro que sepa producir otras cosas de valor o excelencia, pero sí lo es que a lo largo de su existencia va a producir una masiva, importante cantidad de mierda pestilente, kilos, toneladas de heces y estiércol apestoso. Me pregunto cuánta mierda producirá en promedio un ser humano a lo largo de setenta u ochenta años de vida. Me pregunto cuánto pesará toda esa mierda, en cuántos camiones de remolque cabría. Lo poco que he podido investigar es que un occidental caga en promedio 130 gramos de mierda al día y un africano caga 185 gramos diarios. Calculando la población mundial en unas 6 mil 300 millones de personas cagando sin descanso, podríamos calcular a la ligera (con alto temor a equivocarnos) que los seres humanos producimos alrededor de 950 millones de kilos de mierda cada día. Es mucha mierda. Me pregunto si no sería rigurosamente cierto decir que la mayor parte de los humanos que hemos poblado y poblamos este planeta hemos sido consistentes y porfiados productores de mierda y de nada más que nos sobreviva, salvo aquella mierda que se recicla en el mejor de los casos y contamina, en el peor. Cierto es que hay algunos escritores, pintores, músicos (artistas, como les gusta llamarse a sí mismos), pero la mayor parte de ellos han añadido a su miserable caca humana esa otra forma de mierda procesada y de muy dudoso prestigio intelectual (y cuénteseme por favor entre ellos). Pocos son los que, además de mierda, han dejado a la humanidad algo que posea un cierto valor artístico, una belleza indudable que perdure por siglos y nos conmueva y redima de nuestra condición de productores profesionales de mierda.Lo que me lleva a un par de cuestiones un tanto descorazonadoras. Una, ¿cuánta mierda puede haber producido la humanidad desde que el hombre descargó el primer mojón en cuclillas y sin papel suavizante a mano? ¿Podría medirse toda esa mierda que el mundo ha producido en siglos de guerras, genocidios, barbaries y felonías, que sólo han confirmado que de mierda estamos hechos y pura mierda somos? Y la otra, que creo que la especie humana, siendo como es una fábrica incesante de mierda, y habiéndose multiplicado en proporciones alarmantes desde las cuevas hasta la modernidad superpoblada, lo que desde luego aumenta de modo considerable el volumen de mierda que depositamos discretamente en desagües, silos, albañales, alcantarillas y a veces sobre tierra firme como los perros o los gatos, está condenada a destruirse, no por el calentamiento global o en una guerra nuclear, sino ahogada en su propio mar de mierda. Veo el futuro con pesimismo: habrá tanta gente cagando y tanta mierda en los ríos y los mares y tantos glaciales derretidos y tan poca agua limpia, que no habrá forma de que la especie humana deje de extinguirse y perecer bajo el peso abrumador de las toneladas de mierda que lo envenenarán todo y acabarán con la poca agua limpia que quede y nos infectarán de las peores enfermedades y de las más resistentes bacterias alojadas en las heces humanas. Siglos de homínidos odiándose y entrematándose en nombre de unos dioses asesinos confirman que somos, ante todo, unos cagones, unos grandísimos cagones, y que tal vez habría más justicia en el mundo si todavía gobernasen, a su despótica manera, los dinosaurios y tiranosaurios. Cagones como somos, máquinas de producir caca como somos, será nuestra propia caca la que acabará con la humanidad. Y no habrá Dios ni juicio final ni castigo a los pecadores, que todos cagamos por igual y si Dios existe, seguro que cagará también y a lo mejor hasta con crisis de estreñimiento, viendo el desmadre que ha creado. Lo que habrá es un planeta entero cubierto de mierda, apestado a baño de estadio, y millones de moscas y cucarachas que habrán de sobrevivirnos y a lo mejor crearán formas de gobierno probablemente menos crueles que la democracia capitalista. Sería justo por eso que la mayoría de los avisos de defunción publicados en los diarios del mundo terminasen de esta honesta manera: Ha muerto Fulanito de Tal. Vivió tantos años. Cagó tantos kilos de mierda. Fuera de eso, no hizo nada que valga la pena de mencionarse. Pero la gente, claro, se esconde para cagar, echa aerosoles para disimular el olor hediondo de sus deposiciones esforzadas, procura ocultar lo que es un hecho cierto e irrebatible: que los seres humanos producimos mierda en todos los casos y muy excepcionalmente alguna buena idea.

7 comments:

Anonymous said...

Hola Flujanz,
Muy interesante el artículo de Jaime Bayly y pareciera también que está sufriendo de una fuerte depresión. Mi hijo que vive en Europa también me envia artículos de Rodolfo Ybarra y etc. etc. Claro él teniendo 31 años y yo 54 discrepamos en muchas cosas, sobre todo en cuestiones de política. Lo que yo me pregunto es porqué los que escriben y se desatan en críticas contra cualquier gobierno de turno, no escriben (que no es necesariamente el caso de Bayly) en un lenguaje que pueda entender el pueblo Peruano? Eso ya me implica una desconfianza, porque si las mismas personas que ellos pretenden defender contra las injusticias de los diferentes gobiernos, no entienden su retórica, entonces ya parece un mensaje inútil y dirigido a los pocos Peruanos que (entre comillas estan en el gobierno de turno) y que le dan de ganar dinero con la publicación de dichos artículos.

Como yo siempre le digo a mis hijos, con la poca o mucha sabiduría que me asiste por los años que tengo y los varios gobiernos que he vivido como extranjera en el Peru (y no me cambio por nada), hay que sumar y multiplicar no restar y dividir. Las críticas mientras no sean constructivas y nadie piense ayudar a construir un Peru mejor (cosa que sí creo que ha hecho Gaston Acurio, a pesar de la fortuna que ha hecho con toda justicia) con cosas positivas estamos condenados a sufrir los eternos críticos que lo único que hacen es desparramar pesismismo. No creo tampoco que un optimismo irreal sea la solución, simplemente SI NO ERES PARTE DE LA SOLUCIÓN PARA QUE TE QUEJAS!!!

Gracias por este interesante artículo.
Saludos
Christine

Anonymous said...

dichosos todos aquellos que no sufren de estreñimiento

Adriana

Anonymous said...

yo flipo con estos posts

Dante

Anonymous said...

caca, caca, caca....

Adriana

Anonymous said...

Debajo de tres capas de excremento. !!!Qué veranooo¡¡

Jocker

Anonymous said...

Vas a ver que J.P. Feinman tiene razón.

Gasty Libres

Anonymous said...

el articulo de Bayly en tu blog interesante pero acabo de escuchar justo un doctor que hablaba sobre la contaminacion del mar y el rtratamiento de las aguas servidas menciono que el humano produce 300 grms promedio vaya uno a saber si el promedio que señalo bayly es en el africa entonces en el peru 300grx365diasx76 años promedio habras producido 8 toneladas con 322 kilos es decir entraria en un camioncito porter de 9 toneladas mas el chofer